El Papa dejó abierta la posibilidad de visitar San Julián durante 2016

En una jornada que amaneció en Roma bajo los efectos de una pertinaz lluvia, por momentos torrencial, el intendente de Puerto San Julián, Nelson Gleadell, logró concretar ayer una audiencia de varios minutos con el Sumo Pontífice, acompañado por el diputado Leonardo Alvarez y otros jefes comunales que integran la Red de Ciudades Magallánicas.

En una jornada que amaneció en Roma bajo los efectos de una pertinaz lluvia, por momentos torrencial, el intendente de Puerto San Julián, Nelson Gleadell, logró concretar ayer una audiencia de varios minutos con el Sumo Pontífice, acompañado por el diputado Leonardo Alvarez y otros jefes comunales que integran la Red de Ciudades Magallánicas.

A pesar de las inclemencias climatológicas, Francisco dialogó durante varios minutos con el intendente de San Julián, Nelson Gleadell, quien, junto al diputado por ese municipio, Leonardo Alvarez, le hizo entrega de un sencillo presente que contenía tierra y agua de su localidad.

Inmediatamente después le presentó a Juan Ignacio Zoido Alvarez, alcalde de la ciudad de Sevilla en la Comunidad Autónoma de Andalucía y presidente de la Red Mundial de Ciudades Magallánicas; a José Manuel Marques Carvalho, alcalde de la ciudad Sabrosa, distrito de Vila Real en Portugal; al embajador de Filipinas en Portugal, Philippe Lhuillier; a Antonio Luis Santos Da Costa, alcalde de Lisboa; a Emilio Bocazzi Campos, alcalde de Punta Arenas; a José Manuel Núñez de La Fuente, de la Fundación Museo Atarazanas en Sevilla; y a Rafael Crespo Torrado, presidente de la Fundación de Atarazanas y secretario ejecutivo de la Red Mundial de Ciudades Magallánicas.

“PEGUENME UN GRITO”

Cabe señalar que fue el jefe comunal sanjulianense quien oportunamente tramitó la audiencia con el Papa y gestionó que en la misma se incluyera a los alcaldes e intendentes de la Red de Ciudades Magallánicas.

Y ayer aprovechó los minutos que le concediera, en virtud de que Francisco decretará Año Jubilar al período que irá del 8 de diciembre de 2015 al 8 de diciembre de 2016 y que, según se anunció desde la Sede Pontificia, el Papa visitaría el año entrante nuestro país.

Esta podría ser una oportunidad única para contar con su presencia en la tierra donde por primera vez, en suelo argentino y sub continental se ofició misa, a lo que inmediatamente el Sumo Pontífice respondió sonriendo: “péguenme un grito”, a fin de mantenerlo atento a la invitación, cuando llegue al país.

ESPERANZA

Más tarde, Gleadell fue consultado por el periodista santacruceño que lo acompañó en su visita a El Vaticano (Miguel Eugenio Millán) sobre la latente posibilidad que Francisco visite San Julián.

Al respecto puntualizó que “tal como lo venimos haciendo desde hace años, hay que trabajar y trabajar, sin crear falsas expectativas” agregando que “la determinación de Francisco de adelantar para el 8 de diciembre próximo el inicio del Año Jubilar y su presencia en la Argentina durante el año entrante, abren la puerta a la esperanza de que pueda trasladarse hasta nuestra ciudad”.

“San Julián es muy pequeña, en lo que respecta a cantidad de habitantes, comparándola con urbes que integran la Red de Ciudades Magallánicas, como ser Sevilla, segunda receptora de turismo a nivel mundial, y Lisboa, una de las capitales con mayor historia de Europa, pero nuestra historia también es muy relevante“, puntualizó.

ANTECEDENTES DE LA INVITACION

Es importante recordar que en el año 2008, el intendente de la localidad del centro de la provincia de Santa Cruz, había hecho partícipe a Benedicto XVI del deseo del pueblo de San Julián de que el heredero de las sandalias de Pedro oficiara la Misa de los 500 años, en recordación de la que el 1 de abril de 1520 fuera concelebrada por el capellán de la expedición que comandaba Fernando de Magallanes.

Seguidamente Gleadell visitó al entonces Arzobispo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Cardenal Primado de la Argentina, Jorge Bergoglio (hoy Sumo Pontífice), informándole sobre su encuentro con Benedicto XVI y lógicamente sobre los fundamentos del proyecto que lo motivaron.

De esta manera, desde Puerto San Julián se fijaron rumbos y estrategias para que nuevos actores se sumaran a la iniciativa para fortalecerla.

La Red Mundial de Ciudades Magallánicas, que reivindica el valor tanto religioso como económico y cultural de gesta del marino nacido en Sabrosa, se sumó a la propuesta de San Julián y los alcaldes e intendentes que la conforman, tomaron como propio el proyecto de la Misa de los 500 años y junto a Gleadell firmaron un documento que así lo expresa, el cual le fuera entregado ayer a Francisco.