Fue después de denunciar que sus hijos discapacitados sufren discriminaciones y malos tratos en la Escuela Especial Nº 11.
Luego de solicitar que se separe momentáneamente a cinco personas pertenecientes al Equipo Técnico de la Escuela Especial Nº 11 denunciadas por presunto maltrato y abuso de autoridad contra chicos que concurren a dicho establecimiento, un grupo de padres anticipó para hoy la toma pacífica del establecimiento.
La medida según dijeron “es la última instancia para que nuestros hijos puedan volver a la escuela, sin temor a represalias”.
En diálogo con Crónica, Fabián Pereyra, padre de uno de los chicos afectados detalló que la denuncia que involucra a una docente, una psicóloga, una psicopedagoga, una fonoaudióloga y una motricista se efectuó tras escuchar un audio de 4 horas “donde salen a la luz revelaciones escalofriantes de cómo son discriminados y maltratados nuestros hijos a quienes se los compara con animales y se los llama mogólicos y trastornaditos como sus padres”, relató.
Al hacer hincapié en estado de ánimo de los alumnos que hoy no concurren a clases, indicó que los chicos quedaron en “un estado de indefensión tremendo, y si bien nosotros percibíamos que algo había, el audio es revelador y constituye la prueba más contundente de las acciones que cometieron con nuestros hijos porque ahí salen a la luz burlas, la estigmatización constante y el detalle de maltratos físicos que van desde sumergirlos en agua fría para que se callen hasta dejarlos solos en el aula para que se golpeen”, indicó, para luego acotar que “la supervisora de Zona Norte está al tanto de lo que ocurre en la escuela y tiene en su poder una copia del audio”.
En tanto, Graciela Dorado, mamá de un pequeño de 8 años que no puede movilizarse por sus propios medios y presenta dificultades a la hora de alimentarse, confió que en el audio puede escucharse como se ríen del botón gástrico que posee el menor. “Es muy doloroso darse cuenta que aquellas personas en las que confiamos nuestros hijos son las mismas que los maltratan, y por eso pedimos que estas profesionales sean separadas momentáneamente para que nuestros hijos puedan volver a la escuela con sus docentes, puedan retomar sus actividades”, solicitó.
Asimismo se quejó de “la mala utilización que se le da a la trafic del establecimiento” al señalar que muchos chicos hijos de inmigrantes bolivianos son discriminados y directamente no se los va a buscar para llevarlos a la escuela, “los excluyen porque los padres no saben como reclamar un trato justo”, concluyó.
Pedido de sumario
Abordado por este diario, el juez Oldemar Villa confirmó que existe una denuncia que se tramita en el Juzgado Penal Nº 1 aunque se negó a dar detalles sobre la misma. “Estamos en plena etapa de investigación, se están tomando declaraciones, tenemos el audio, aportado por los padres y estamos a la espera del sumario administrativo iniciado por la supervisora”, indicó para finalizar.
(Fuente: Patagonia Nexo.)
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