La DDI local y la División de Lucha contra la Trata llevaron adelante un operativo conjunto en varios locales nocturnos y domicilios particulares. Ocho mujeres fueron puestas a resguardo, mientras que una madre y su hijo fueron detenidos en el marco del procedimiento.
Durante la madrugada de ayer se realizaron cinco allanamientos ordenados por el Juzgado Federal de Río Gallegos, en el marco de un trabajo conjunto encarado por la DDI de Río Gallegos y la División de Prevención y Lucha contra la Trata de Personas, ambos de la Policía Provincial.
Dos de los cinco operativos se concretaron en bares nocturnos: Sunami y Alma. Los restantes tres fueron en viviendas particulares.
De estos lugares se rescató a ocho mujeres, las que se encuentran bajo resguardo del personal de la Subsecretaría de la Mujer.
El operativo se determinó luego de una extensa investigación que culminó con la orden de allanamiento con el fin de desarmar lo que se consideraba una posible red de trata. Los operativos fueron simultáneos en los locales nocturnos, uno ubicado en la intersección de las calles Mariano Moreno y Blas Parera; el otro situado en Pasteur al 600. Allí, si bien había mujeres, no se constataron menores de edad trabajando.
Por disposición judicial, tanto los propietarios como los encargados de ambos locales fueron demorados y trasladados a la comisaría para ser puestos a disposición de la Justicia, entre ellos una madre y su hijo, quienes quedaron detenidos. En tanto, se les tomó declaración, también en sede policial, a los parroquianos presentes en el momento del operativo.
Los efectivos también se apersonaron en los domicilios particulares de las personas aprehendidas, uno en calle Pasteur al 600, el otro en Estrada al 500 y el último, en la calle San Pablo del barrio 499 Viviendas.
En el lugar, según dejaron trascender fuentes policiales, se habrían secuestrado elementos de interés para la causa, tales como agendas y objetos relacionados con el supuesto negocio de explotación sexual.
Según consignaron las fuentes policiales, las ocho mujeres rescatadas son oriundas de otras provincias y países. Las mismas se encuentran acompañadas bajo la tutela de la licenciada de Trabajo Social de la División de Trata de la Policía Provincial y personal de la Subsecretaría de la Mujer.
En los allanamientos trabajó personal de las seccionales policiales Segunda y Tercera de nuestra localidad, del Comando Radioeléctrico, de la División de Investigaciones de Río Gallegos y de Piedra Buena, agentes de la división Narcocriminalidad local, de las Fuerzas Especiales de Delitos Complejos, personal de Análisis Criminal supervisado por el jefe de la División Prevención y Lucha contra la Trata de Personas, junto al subdirector provincial y de la Zona Sur de la DDI.
(Fuente: La Opinión Austral.)
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