Pesqueras españolas aportarán fondos por la emergencia

Varias pesqueras de capitales españoles darán ayudas para rehabilitar localidades anegadas por el temporal en Chubut y Santa Cruz. Así se informó desde la prensa de Vigo, España. En Comodoro Rivadavia lo harán Argenova, Iberconsa y Altamare (esta última pasó a manos de capitales chinos). En Santa Cruz aportará fondos la empresa Profand.

Un “temporal inusual” arrasó el pasado fin de semana ciudades costeras de la Patagonia argentina de las provincias de Chubut y Santa Cruz. En Comodoro Rivadavia las riadas arrasaron unas 2.000 viviendas y causaron grandes destrozos en viales, puentes y servicios, y las administraciones locales han activado una especie de cuenta solidaria para contribuir a la reconstrucción a la mayor brevedad. La industria de capital vigués asentada en Argentina se ha volcado ante esta petición al gobernador de Chubut, Mario das Neves. Argenova (filial de Pescanova), Iberconsa y Altamare (ex de Pereira y ahora de Shanghai Kaichuang, los dueños de Albo) aportarán fondos a una cuenta conjunta para los damnificados de esta provincia, y Profand hará lo propio en Santa Cruz.
“Hay que reconstruir por lo menos entre 2.000 y 2.500 casas, además de pavimento y puentes y un sinnúmero de obras más. En lo que puedan aportar, agradecido”, había solicitado públicamente el gobernador Mario Das Neves el lunes a representantes del sector.
El vínculo del sector gallego con el país es extenso y fructífero. Iberconsa, una de las compañías de mayor proyección en Argentina, opera desde Puerto Madryn, al igual que Altamare. Argenova, como avanzó FARO, remitió a la provincia un proyecto para la construcción de una factoría de elaborado con muelle en Rawson para intensificar su capacidad extractiva en el segmento del langostino salvaje. La compañía local Conarpesa también se ha comprometido a contribuir a las tareas de rehabilitación.
El gobernador chubutense también analizó con las pesqueras la promulgación de una nueva ley provincial de pesca, en base a la cual se elevaría el número de licencias pesqueras y que beneficiaría en primer lugar a la llamada flota amarilla (pequeños barcos fresqueros que faenan merluza y langostino cerca de costa y para tratar en tierra). Para la administración provincial la normativa actual está “desactualizada” y el incremento del número de licencias no supone un peligro para la conservación de las pesquerías. Das Neves garantizó por último que peleará por restaurar los reembolsos “con el apoyo de sectores como el Frente para la Victoria y otros ligados al peronismo”, un incentivo fiscal para las exportaciones.

(Fuente: La Opinión Austral.)