Ante el proyecto de Scippo y tambiAi??n la idea de Giubetich de realizar una audiencia pA?blica por la superpoblaciA?n canina en nuestra ciudad, el Partido Obrero afirmA? que es una pAi??rdida de tiempo. AdemA?s, seAi??alaron las impreciciones de ambos funcionarios.
Basta de distracciones, castraciA?n gratuita, masiva y sostenida en el tiempo
“Este fin de semana el intendente Giubetich en paralelo a al concejal Sccipo hicieron declaraciones en lo referido a la “problemA?tica de los perros callejeros”.
Lejos de dar plantear soluciones ambos prefirieron continuar dilatando una situaciA?n que se viene denunciando con aAi??os de antelaciA?n, por la conocida acciA?n de diferentes asociaciones animalistas, personas a tAi??tulo personal y protectoras de animales.
Una variedad de imprecisiones que se desprenden de los dichos de ambos.
Es irreal el nA?mero de canes en la ciudad, 35 mil y no se comprende ni se justifica la cifra ofrecida. No hay datos oficiales y los extra oficiales hablan de un mA?s generoso 70 mil, y siempre en crecimiento. El alcance del plan de castraciones actual demuestra mA?s una falta de voluntad que de ausencia de recursos: 300 canes al mes son 10 por dAi??a, y sabemos que no castran todos los dAi??as. Existen limitaciones para acceder a la castraciA?n, falta de publicidad, cupos por persona, burocracia.
Existe la Ordenanza Municipal Nro. 8426 que declara a la ciudad libre de eutanasia. Pero que no avanza con las castraciones masivas ni tampoco se instrumenta un presupuesto para su sostenimiento. Un hecho grave es que se incumple con la norma ya que la vieja “perrera” continA?a “levantando” perros callejeros sin denuncia de agresiA?n previa, tal como seAi??ala la ordenanza citada. Avanza en una “tenencia responsable” que solo es una manera de deslindar responsabilidades del estado a la poblaciA?n, en una temA?tica de salud pA?blica y por lo tanto de A?rbita de actuaciA?n estatal.
La construcciA?n de un eco-albergue debe ser desestimada porque fomenta el abandono: donde el perro es retirado de la calle para que mueran hacinados en un canil, lo que devendrAi??a en una forma de sacrificio.
En suma todas las polAi??ticas pA?blicas sobre el control animal han fracasado, desde el sacrificio, la captura y el hacinamiento en albergues.
Diferentes experiencias en el paAi??s han comprobado que el control de la poblaciA?n de los animales domAi??sticos es la soluciA?n a esta problemA?tica, porque logra un equilibrio entre la salud pA?blica y el bienestar animal, sobre la base de la prevenciA?n.
La Ordenanza Municipal Nro. 8426 debe ser reemplazada por una nueva norma que garantice un presupuesto especAi??fico para la resoluciA?n de esta problemA?tica. Las castraciones deben implementarse de manera masiva de carA?cter gratuito y deben sostenerse en el tiempo para llegar a un punto de equilibrio. La problemA?tica es grave y por lo tanto esta medida debe ser acompaAi??ada de una fuerte propaganda destinada a la concientizaciA?n de la poblaciA?n en materia de “tenencia responsable”, asAi?? mismo facilitar el acceso a la castraciA?n, eliminando trA?mites burocrA?ticos y que no hacen al efecto de la medida.
La audiencia pA?blica solo puede ser vinculante y deberAi??a habilitar a su pronta resoluciA?n, de lo contrario solo es una manera de dilatar en el tiempo la resoluciA?n de la problemA?tica, habida cuenta de la cuantiosa informaciA?n de que dispone el municipio y que es fruto del trabajo cotidiano que numerosas personas organizadas aportan.”
(Fuente: Prensa Obrera.)
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