Tras cinco años, los cicloturistas volvieron a pedalear “Por la Senda del Carbón” desde Río Turbio hasta Río Gallegos. “Siempre se disfruta porque vas encontrando diferentes terrenos y cada uno es una aventura para atravesar”, manifestó Karina Galván sobre el recorrido, que duró tres días. “Son momentos únicos”, aseguró Esteban Muroni de Río Grande.
Con la participación de cicloturistas de Río Gallegos, Río Turbio, 28 de Noviembre, Tolhuin y Río Grande, luego de tres días de pedalear, concluyó la 15° Edición de “Por la Senda del Carbón” en homenaje a la gesta del carbón.
Ya en la capital santacruceña, Karina Galván, de Aventureros de la Cuenca, organizador de esta edición, explicó a La Opinión Austral que “hicimos dos eventos, la Senda del Carbón que inicia en Mina 1 y culmina en Río Gallegos en tres etapas: la primera es la Cuenca Carbonífera-Puente Blanco, la segunda, Puente Blanco-Bellavista y la tercera, Bella Vista-Río Gallegos. El primer día tuvimos, por el aniversario de 28 de Noviembre, el paseo 28 de Noviembre-Puente Blanco de la gente de la Cuenca Carbonífera, con regreso a la cuenca. Los dos eventos fueron declarados de Interés Provincial”.
Vale señalar que en el primer evento participaron 50 personas y en el segundo, 38.
En cuanto al recorrido, señaló que “salió todo muy bien, la gente que nos acompañó en la logística, el Regimiento Mecanizado de Rospentek, Protección Civil, ambos municipios, Hospital San Lucas y el Gobierno de la provincia que colaboró con combustible. Todos los días estuvieron divinos. Estuvo ventosa la primera noche, pero los tres días hubo sol y el viento a favor, de Bella Vista para acá, agradecida con el clima, se dieron todas las condiciones climáticas para disfrutar el paseo. Nos costó un poco el tramo de Bella Vista, la parte de ripio, pero siempre se disfruta porque vas encontrando diferentes terrenos y cada uno es una aventura para atravesar”.
En el Museo Ferroviario Roberto Galian, los cicloturistas compartieron sus impresiones sobre esta edición, se tomaron fotos y además hubo reconocimientos a los pioneros de esta actividad: Héctor Alderete, Gabriel Aguirre y Juan Carlos Guevara. En la oportunidad también estuvo Magdalena Coria, la primera mujer que participó de la Senda del Carbón en 2006.
La actividad continúa para Aventureros de la Cuenca, sobre lo cual Galván adelantó que “el 7 y 8 tenemos A-Tracción Aventurera, la tercera edición, lo hacemos en forma conjunta con la Municipalidad para difundir las bellezas de la cuenca. Ya tenemos inscriptos de Pico Truncado, Puerto San Julián, Río Gallegos y de la cuenca”.
Cerrando, sobre lo que espera que quede en las experiencias de cada participante, manifestó que “en toda la provincia tenemos diferentes grupos, el compromiso de cada agrupación no es sólo andar en bicicleta, sino hacer conocer su zona, su historia. Que se haya podido realizar la XV edición de la Senda del Carbón, que no se hacía desde el año 2013, es un logro con mucho esfuerzo, gracias al apoyo de la gente, nos deja eso que es un logro más de todo el cicloturismo de la provincia, para sumar una actividad más para difundir la historia y las riquezas de Santa Cruz”.
Experiencias fueguinas
En el grupo que participó en esta edición hubo cuatro fueguinos: Esteban Muroni, Gustavo Tello y José Toranza de la Biciposta de Río Grande y Marcos Toranza de Tolhuin.
Para Esteban Muroni, la experiencia “fue muy buena, como en 2007 y 2008 que tuve la oportunidad de hacerlo. El grupo de Aventureros de la Cuenca estuvo en todos los detalles, los tres días fueron hermosos, bien organizados, se pedaleó a un buen ritmo, se pudo hacer turismo, se pudo compartir con amigos. Son momentos únicos, cuando uno sube a una bicicleta y recorre, deja de lado un montón de preocupaciones y solamente se enfoca en las cosas que le hacen bien a uno, a uno y al resto”.
“Es uno de los pocos momentos en los que se le desea el bien al otro, se hacen cosas por el otro y el otro hace cosas por uno, como debería ser la vida, el cicloturismo es un ejemplo ideal de cómo sería una sociedad. Se convive, se comparte, se charla, siempre se llega a soluciones, se puede discutir tranquilamente, nunca acaloradamente, como debe ser la vida. El estado que tenemos cuando subimos a una bicicleta es diferente al de cualquier persona, es un buen estado de ánimo, tenemos un espíritu conciliador de juntarnos, de pasarla lo mejor posible porque para eso vinimos. Toda la gente que pueda, que se sume a compartir la actividad plenamente, tanto física como mental, es algo muy saludable”.
Por su parte, Gustavo Tello, quien participó por primera vez, comentó que “fue toda una experiencia y un desafío, ya que soy novato, pero gracias a amigos como Gustavo Tello, Toranza, su hijo y tantos otros que fui haciéndome en Río Gallegos, la pasé muy lindo. Sobre todo, lo que rescato es poder conocer un poco más de mi Argentina, fue algo muy emotivo arriba de una bicicleta y con grandes amigos como con los que me tocó compartir estos tres días, estoy muy agradecido”.
Cerrando, Muroni agregó “quiero felicitar a los Aventureros de la Cuenca, que pudieron organizar y han tenido el espíritu del cicloturismo, de poder compartir, organizar y hacer todo por el que está al lado, por el prójimo”.
(Fuente: La Opinión Austral.)
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