Se trata de una cocina que se alimenta con agua y desechos. Es una prueba piloto que se inicia en breves días más. Se eligió a través del Municipio y la Secretaría de Desarrollo Humano el ‘Comedor de Juan’, del barrio San Benito, debido a la gran labor social y de contención que en dicho espacio se efectúa.
En las instalaciones del ‘Comedor de Juan’, ubicado en el barrio San Benito, se finalizó con la instalación de la primera cocina a biogás que se coloca en Río Gallegos. Se trata de un proyecto cien por ciento ecológico que aprovecha el desecho orgánico y animal para la generación de biogás y fertilizante líquido.
El mencionado elemento es un biodigestor que solo requiere para su puesta en marcha de 600 litros de agua y se abastece de un kilo de desecho alimentario u órganico para una hora de cocción.
Es la primera cocina de estas características a biogás para comedores comunitarios instalada en esta ciudad capital y por ello el interés de las autoridades municipales por emplazar y dar a conocer el uso de este tipo de tecnología. Según detallaron los funcionarios, a raíz de su utilidad y potencialidad comenzaron las gestiones y reuniones que se fueron articulando a través de la Secretaria de Desarrollo Humano, la Dirección de Turismo y la empresa HomeBiogas Argentina.
El comedor de Juan Romero del barrio San Benito es el primero en contar con este equipamiento en Río Gallegos; y se eligió al mismo por su fin social y comunitario. De ahora en más, sólo resta culminar conexiones y estará lista para utilizarla.
El biodigestor que se instaló en el barrio San Benito corresponde a un modelo de escala domiciliaria que brinda a través del procesamiento de un kilo de desechos de comida, una hora de gas a una familia en una funcionalidad de cuatro horas por día. El precio del equipamiento es económico, si se lo compara con otros elementos, como por ejemplo un celular de gama media y alta. Además, esta tecnología genera energía limpia y reutilizable, ya que dicho elemento genera un fertilizante al final del ciclo que puede ser utilizado para sembradíos.
Adriel Ramos, secretario de Desarrollo Humano dijo sobre la novedad: “estamos muy orgullosos de poder estar finalizando el proceso de instalación de la primera cocina a biogás que se instala en Río Gallegos y la más austral. Además, es la segunda fabricada en el país que se gestiona a través de un Municipio, lo que es fundamental. Queremos comenzar a utilizar este tipo de tecnología ya que cada persona genera diariamente un promedio de dos kilos de basura diario, donde la idea es replicar este proyecto, que fomenta un modelo más sostenible de comunidad y llegar al ‘comedor de Juan’ con este recurso es importante porque se van economizar muchos recursos”. Y confió el funcionario que “este tipo de experiencias en breve puedan ser replicadas en otras acciones y espacios en Río Gallegos”.
Por su parte Juan Khouri, trabajador de la firma HomeBiogas Argentina, agradeció la confianza depositada por el Municipio de Río Gallegos para la instalación del digestor: “contento por el acompañamiento del Secretario de Desarrollo Humano y por tener la posibilidad de dar a conocer esta tecnología, ya es muy importante que el Municipio de esta ciudad haya tenido la decisión desde lo público de dar una solución ambiental en generación de energía que en este caso es a partir de desechos orgánicos, que tienen una capacidad de generación -en este caso- para biogás y que se puede utilizar para calefaccionar o cocinar”. También Khouri destacó las gestiones iniciales y el contacto realizado por Paulo Lunzevich, director de Turismo del Municipio para comenzar concretar dicha experiencia.
Lunzevich, valoró la puesta en funcionamiento del digestor, “ya que el mismo es parte de un sueño cumplido de poner en marcha distintas alternativas que estén relacionadas con el medioambiente y con lo que genera la actividad hotelera y gastronómica en la reutilización de los residuos en el objetivo de generar energía limpia”.
El Director de Turismo expresó: “tenemos el primer ejemplo y la intención es que sean muchos más, donde detrás de esto buscamos que los gastronómicos de la ciudad puedan apadrinar con sus residuos la generación de energía”. También se trabaja en el proyecto de tratamiento de los aceites vegetales derivados de la actividad gastronómica para que puedan ser reciclados, una iniciativa en la cual está trabajando y aportando la Agencia Ambiental Municipal”, indicó.
Finalmente Pablo Irazoqui, responsable de la Agencia Ambiental de la Comuna sostuvo: “estamos muy entusiasmados con esta prueba piloto, ya que del lado ambiental esto representa una forma muy simple de reducir la basura, sobre todo los desechos órganicos domiciliarios. Además abre todo un abanico de oportunidades ya que desde un hogar, una escuela, se pueden calefaccionar con energía limpia y a su vez generar fertilizante líquido que puede ser utilizado para huertas y es una forma más de generar empleo”. El funcionario aseguró que “esto es un paso más para el cuidado del ambiente y que reduce costos que seguramente Juan lo sabrá aprovechar de la mejor manera”.
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