El último tuvo lugar al promediar la tarde del viernes y fue protagonizado por un grupo de trabadores municipales de planta permanente que se identifican como “autocovocados” a los que se sumaron varios jubilados.
En su mayoría discrepan con la conducción gremial del SOEMCO liderada por Julián Carrizo, al cual le cuestionan su inacción para gestionar una recomposición de los salarios congelados desde hace casi tres años.
Una prueba clara de ello, argumentan, es que esta misma semana renunció el secretario adjunto del gremio, Daniel Reyes, por fuertes desavenencias con Carrizo.
La caravana de unos cien vehículos recorrieron las calles céntricas y a su finalización los autoconvocados difundieron un comunicado de prensa por el cual dan cuenta que “desde hace un prolongado tiempo la familia municipal viene sufriendo retrasos salariales y condiciones laborales precarias”.
“Estas cuestiones –destacan- además del impacto en la economía de cada hogar, también trajeron como consecuencia descreimiento, divisiones y desánimos entre nosotros”.
“Esta autocrítica de errores que se cometieron la hacemos diariamente para poder reconstruirnos y en esa ardua tarea estamos por el beneficio del conjunto de las trabajadoras y trabajadores municipales”, resaltan.
Luego ponen de manifiesto que “bajo ningún tipo de circunstancias podemos resignar luchar por la recomposición salarial acorde a las necesidades que hoy tienen los trabajadores municipales activos y pasivos”.
En concreto, demandan un incremento salarial del 40 %, en consonancia con los acuerdos que ya han logrado algunos sectores de trabajadores de la administración provincial.
Finalmente demandan “que nuestra entidad gremial vuelva a trabajar en conjunto con sus bases” y piden al intendente Fernando Cotillo convoque a una mesa de discusión salarial en un plazo de 72 horas.
Fuente: El Patagónico
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