En este contexto, expresó, que “está presentando una serie de grabados que representan la vida cotidiana de los pobladores de una ciudad imaginaria, es decir, cuyos seres tienen cuerpos humanos con cabezas de animales”.
Sobre la realización de la obra, indicó, que “son grabados intervenidos con la técnica de xilografía hechos en una cartulina escolar y con piso de goma. Una vez representado se estampa y saca una serie copias de esa imagen logrando reproducir sistemáticamente la misma como una especie de sello gigante”.
Por ejemplo, comentó, que en una de las obras aparece un personaje con cabeza de ballena comiendo, el cual denota una escena melancólica y en otra realizó una serie de unas personas con cabeza de burro, cuya situación es más tensa.
Asimismo, el artista de Tierra del Fuego, señaló que “trabaja en este proyecto hace varios años e indicó que participó en una clínica en la ciudad de Río Gallegos y que luego empezó a desarrollar dicha temática a partir de sus viajes”.
La obra que presenta en el Museo de Arte Eduardo Minnicelli se llama ´Fábulas cotidianas´, la cual representa personajes fantásticos en acciones concretas y cotidianas que, según el artista, no tienen nada de mística, ni poética especial.
En relación a su participación en la muestra “Memorias Rebeldes” y formación académica, manifestó que fue convocado a participar de esta propuesta por Sandra Ruiz Díaz, y agregó que se formó en la Escuela Municipal de Bellas Artes Carlos Morel de Buenos Aires y, una vez egresado, se fue a vivir a Tierra del Fuego, donde se especializó y desarrolló distintas actividades, talleres, clínicas y muestras colectivas en el Museo Fueguino de Arte.
Durante el 2016, en Río Gallegos, se capacitó en una clínica con la curadora y profesora Kekena Corvalán. Actualmente, trabaja en Plaza de las Artes, en el Departamento de Gestión Cultural de la Universidad de Tierra del Fuego.
El artista Maxi López, sostuvo, que el grabado tiene una esencia rebelde y revolucionaria porque va en contra de la obra única, es decir, en una pintura existe una sola imagen que se puede comercializar y no tiene reproducción y si la tiene es réplica.
Sin embargo, afirmó, que en el grabado se parte de una matriz original y todas sus imágenes son originales y tienen el mismo valor posibilitando la socialización del Arte, llegando a más personas y lugares.
“En la Argentina de principios de siglo XX, los anarquistas iban a las puertas de las fábricas y regalaban a los obreros obras en grabado, de este modo, cada uno tenía en sus casas una obra original y, además, permitía llegar discursivamente a mayor población”, planteó.
Finalmente, López, agregó que la propuesta del Minnicelli es increíble porque permite nuclear a artistas de toda la Patagonia, aún más después de la pandemia. Es muy importante que las obras de los artistas se conozcan en lugares de difícil acceso y que compartan con otros colegas, por ello, hay que promover el Arte”.
Fuente: LU 14 Radio Provincia de Santa Cruz.
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