Sindicatos hermanos como la CGT Zona Sur, APAP, UPCN, SUTEP, SADOP, UPSAP y Si.T.O.S. realizaron una recorrida por el Taller del Viento. Cada paso que dan en este proyecto refleja lo que el sindicato y la mutual pueden lograr cuando se trabaja con visión y compromiso por el bien de los afiliados y de toda la comunidad. No se trata solo de infraestructura, sino de un proyecto educativo que se erige como un faro para la educación técnica en Santa Cruz, el primero de su tipo en el país, con un enfoque mutualista y agropecuario.
El Secretario General de SIPGER expresó su orgullo al ver cómo esta obra avanza, construida con mano de obra local y el esfuerzo de sus compañeros. Las instituciones que representan siempre han estado en la primera línea cuando se trata de defender el derecho a una educación digna y de calidad, que prepare a los jóvenes y trabajadores para los desafíos del presente y el futuro.
La formación en oficios industriales que están impulsando no es un capricho, sino una necesidad vital para el desarrollo de la provincia. Sectores como el agro, la energía, la minería, el turismo y la economía del conocimiento requieren recursos humanos calificados. Sin embargo, no basta con señalarlo, es necesario gestionar, ejecutar y trabajar. Es crucial alinear las políticas educativas con las necesidades industriales y tecnológicas, y eso es lo que están haciendo. Cada tornillo que se ajusta en este taller, cada torno que se utiliza, cada herramienta que se pone en manos de los estudiantes representa un paso más hacia la provincia soñada: una Santa Cruz más fuerte, preparada y digna.
Este esfuerzo no termina aquí. Continuarán con el plan de la escuela técnica en Caleta Olivia, en conjunto con PAE y el ITBA, porque saben que el futuro de la educación técnica no se construye con palabras vacías, sino con hechos concretos, con aulas llenas y herramientas a disposición de los jóvenes.
Hoy en día, existen 1.723 instituciones de educación técnico-profesional en todo el país, con más de 775 mil estudiantes. En Santa Cruz, ellos también están haciendo su parte y cumpliendo con la palabra empeñada. Este taller es una muestra de ello: instalaciones de primer nivel, equipadas para que los estudiantes aprendan en las mejores condiciones. La educación técnica es el camino hacia un trabajo digno y una oportunidad real para que los jóvenes se inserten en un mercado laboral que los necesita.
Es fundamental no dejar de lado la importancia de articular esfuerzos entre la escuela, el Estado, las empresas y los sindicatos. Solo de esta forma se puede asegurar que la educación sea un verdadero motor de igualdad de oportunidades. Es necesario acercar la escuela a la realidad laboral, para que el futuro no sea una promesa lejana, sino una construcción concreta y diaria. En ese futuro, los sindicatos y la mutual seguirán firmes, con el compromiso de que cada joven y trabajador de Santa Cruz cuente con las herramientas necesarias para ser protagonista del desarrollo de la provincia.
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