Alrededor de 50 trabajadores intentaron ingresar a la sede, como lo hacían habitualmente, pero este martes descubrieron que el sistema biométrico de ingreso ya no reconocía sus huellas. Ante esta situación, los empleados decidieron concentrarse en el hall del edificio, manifestándose junto al personal de seguridad privada que se encontraba en el lugar.
Según los delegados gremiales, estos despidos forman parte de una serie de desvinculaciones que ya suman más de 550 en los últimos 13 meses.
“Nos dijeron que es una orden que ellos acatan desde el Ministerio de Salud, que no puede hacer nada”, relató uno de los empleados despedidos, quien prefirió no revelar su identidad. La mayoría de los afectados ingresó a trabajar en el PAMI desde el año 2019 en adelante, lo que refuerza la idea de despidos selectivos.
Desde la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), gremio que representa a los empleados del PAMI, señalaron que los despidos buscan allanar el camino para la privatización de servicios en beneficio de empresas del sector de la salud. “Denunciamos que ‘los buenos muchachos’ de la salud buscan quedarse con el PAMI, sacrificando los derechos de los jubilados y vulnerando a los trabajadores”, afirmaron desde el gremio.
Los delegados también reclamaron el cese del congelamiento salarial y advirtieron sobre la posibilidad de tomar medidas de fuerza si las desvinculaciones no se revierten. “Desde ATE, nos comprometemos a defender con firmeza los derechos de quienes, día a día, sostenemos esta institución. Si nos tocan a uno, nos tocan a todos”, expresaron en un comunicado oficial.
Representantes de todos los sindicatos que operan dentro del organismo realizaron una recorrida por las oficinas afectadas para escuchar las inquietudes de los empleados y organizar una asamblea general. En este encuentro, se propuso votar un plan de lucha que incluiría paros y movilizaciones en rechazo al ajuste y a las desvinculaciones arbitrarias.
El clima de tensión en PAMI refleja la preocupación no solo de los trabajadores sino también de los jubilados que dependen de esta institución para acceder a servicios esenciales. Mientras tanto, los gremios continúan articulando estrategias para evitar que los despidos avancen y se consolide lo que consideran un desmantelamiento del organismo.
0 comments