Se trata de ejemplares de la fauna marina que murieron en el transcurso del mes de octubre y en lo que va de noviembre por causas naturales, pero también existe la posibilidad de que en algunos casos los decesos se hayan producido por la influenza aviar, dado que aún no hay constancias firmes de que la misma se haya disipado.
Además, se decidió llevar adelante este operativo de manera inmediata porque se está produciendo la llegada migratoria de miles de gaviotines sudamericanos que anidan por varios meses en esta zona costera y al tomar contacto con las especies muertas pueden generar peligros contagios.
En la recolección de los cuerpos diseminados intervinieron personal de Protección Civil; de la Secretaría de Ambiente y Seguridad Urbana del Municipio, Bomberos Voluntarios, Consejo Agrario Provincial e integrantes de la entidad ambientalista CADACE, en cuya sede se centró el operativo que, para su logística, incluyó un vehículo de rescate equipado con grúa y un camión con caja volcadora.
De este modo, se dio cumplimiento a estrictas normas del SENASA, ya que los protagonistas desempeñaron su tarea con indumentaria de protección biológica, rociando los cuerpos de las especies muertas y los sitios donde fueron hallados con un líquido desinfectante, en tanto que la deposición de los cuerpos se hizo en una cava del basural municipal.
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