Más de 200 chicos y chicas participaron en los talleres de Artes y Oficios de Niñez

Los niños y adolescentes expusieron los trabajos que realizaron durante los talleres. Luego recibieron certificados por parte de las autoridades municipales. Se trata de espacios de formación que facilitan la salida laboral y que proporcionan contención y empoderamiento de sus derechos. Destacaron el valioso trabajo de los talleristas que se desempeñan en este espacio municipal.

El Centro de Promoción de Derechos de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Municipalidad de Río Gallegos realizó este sábado en el gimnasio municipal Luis Lucho Fernández, el cierre de los talleres de artes y oficios dictados durante este segundo cuatrimestre.
La jornada incluyó una exposición de los trabajos realizados por los más de 200 niños y adolescentes que participaron en los diferentes espacios formativos, y la entrega de certificados a todos los jóvenes que culminaron sus actividades.
En la oportunidad, Julia Chalub, secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia, destacó la importancia de este evento de fin de año, que por primera vez se realizó en un gimnasio, brindando un espacio más amplio y cómodo para las familias. “Este cierre de talleres ha sido muy especial, y la respuesta de las familias ha sido increíble. Elegimos el gimnasio para ofrecer un lugar más cómodo y accesible para todos, y realmente la propuesta ha tenido una excelente convocatoria. Estamos muy contentos con los resultados y con la participación de todos”, comentó Chalub.
“Pensemos en el valor de este Centro, donde hay cientos de niños y adolescentes que pueden aprender un oficio, que pueden conocer a otros amigos también. Es un espacio de contención que ya está instalado en la ciudad y que, por supuesto. vamos a seguir defendiendo y potenciando”, afirmó.
Los talleres ofrecidos durante el cuatrimestre incluyeron carpintería, herrería, electricidad, corte y confección, barbería, peluquería, manicuría, reparación de electrónicos, teatro, crochet, confección de juguetes, y lectura, entre otros. Cada uno de estos espacios no solo brindó conocimientos prácticos, sino que también sirvió como un lugar de contención y empoderamiento de los derechos de los niños y adolescentes.
Al respecto, María José Oyarzún, responsable del Centro de Promoción de Derechos, también participó del evento y expresó su satisfacción por la evolución de los talleres. “Ha sido un cuatrimestre muy positivo. Los chicos han podido mostrar el trabajo que realizaron durante este tiempo, y ver cómo han crecido en cantidad y calidad es realmente emocionante. Los talleres no solo brindan formación técnica, sino que también enseñan a los chicos valores importantes como la responsabilidad, el trabajo en equipo y la creatividad”, dijo Oyarzún. Además, destacó el crecimiento de la propuesta, señalando que los chicos han logrado elaborar productos en diversos oficios que ya tienen salida laboral.
Oyarzún también resaltó la amplia participación de las familias, quienes acudieron masivamente a apoyar a los jóvenes en la exposición de sus trabajos. “Es hermoso ver cómo las familias acompañan a sus hijos en cada uno de estos proyectos. La participación familiar es clave, y este cierre es una excelente oportunidad para que todos puedan ver el esfuerzo y los logros de los chicos”, agregó Oyarzún.
En cuanto a la estructura de los talleres, los niños y adolescentes desde los 12 años pudieron participar de los oficios, mientras que los más pequeños, de 6 a 11 años, tuvieron su propio espacio en talleres de cocina y pastelería. Otros talleres artísticos, como el de teatro y el de juguetes, también ofrecieron un espacio donde los chicos pudieron expresarse y desarrollar sus habilidades.
Además de la formación técnica, el Centro de Promoción se destacó por su enfoque en la inclusión y el bienestar de los participantes. Durante el año, se proporcionó apoyo en nutrición con la incorporación de la copa de leche, lo que permitió que muchos chicos pudieran participar en las actividades sin preocupaciones adicionales. Oyarzún comentó: “Sabemos que ha sido un año difícil para muchas familias, y por eso tratamos de ofrecer un espacio donde los chicos puedan sentirse acompañados, aprender, y también recibir algo de lo que necesitan para estar bien”.
De cara al futuro, tanto Chalub como Oyarzún confirmaron que el Centro de Promoción continuará con su labor durante el verano, con nuevas propuestas y actividades. “Ya estamos preparando los talleres para enero, y continuaremos ofreciendo espacios de aprendizaje, integración y contención para todos los chicos de Río Gallegos”, afirmó Chalub.