Los intendentes Matías Mazú y Hugo Garay, y los dirigentes gremiales Mario Castillo, Marco Navarrete y Oscar Sánchez traslucieron su alegría y emoción por el significado del acto de mañana, en el que la presidenta Cristina Fernández inaugurará la Central Termoeléctrica. Asimismo, convocaron a toda la comunidad a participar de este encuentro, que será cerca de las 14 horas.
El viernes no será un día más en la historia de Río Turbio y de la Cuenca Carbonífera. Alrededor de las 14 horas, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, inaugurará el primer módulo de la Central Termoeléctrica, haciendo realidad el sueño de muchos pioneros, antiguos pobladores y trabajadores del yacimiento en sus distintas etapas. Por esa razón, los referentes enfatizaron la trascendencia de esta jornada, en una entrevista realizada por Lorenzo Hernández en LRA 18 Radio Nacional.
Inicialmente, Mazú recordó el camino que debió recorrer la comunidad para llegar a esta instancia, y puntualizó las dificultades generadas en la década de 1990, cuando el gobierno neoliberal de Carlos Menem “nos fragmentó, nos dividió y nos lastimó”. “Esta segunda década infame hizo que los sindicatos perdieran su lugar, que nos peleáramos entre familiares. Había una tremenda confusión. La perseverancia y el compromiso de los pueblos permitió que podamos llegar a un esquema de unidad y sentarnos a hablar con quien tenía la decisión, que era Néstor Kirchner, para que nos escuchara y definiera”, expresó.
Mazú mencionó las palabras de Máximo Kirchner, quien en su visita a la Cuenca dijo que la labor en el yacimiento debía continuar y que había que sacar los millones de toneladas de carbón para homenajear de la mejor manera al ex presidente. “El proyecto nacional da para mucho tiempo más. Tenemos que ir por un módulo más, por más trabajo, por más producción. Lo que se viene es tan importante como lo de ahora. Hay mucho por hacer. En diciembre inauguraremos el otro módulo. El ministro Julio De Vido marcó un objetivo, y seguramente trabajaremos para lograrlo y así, cumplir con lo que nosotros mismos pedimos”, señaló.
Posteriormente, Sánchez remarcó la presencia de todos los trabajadores y representantes sindicales de la comunidad en este evento. Para Navarrete, “tenemos que armar una pueblada y movilizarnos para culminar una etapa soñada por mucha gente”, mientras que Castillo solicitó que “vayamos todos con banderas argentinas a saludar a nuestra presidenta, que sigue cumpliendo con Río Turbio, y a evocar nuevamente la memoria de Néstor, que fue quien empezó todo esto”. “La usina está ahí, nadie nos la regaló. Pasamos años de luchas, y Néstor fue parte de eso, porque fue un laburante que nos escuchó”, añadió.
“Nuestras localidades tienen el mismo destino. El viernes, para nosotros, será un día de fiesta para toda la Cuenca. Tenemos que ir hermanados para compartir un día inolvidable, que será clave no solo para quienes estamos acá, sino para las generaciones que se vienen”, manifestó Garay.
Para cerrar, Mazú retomó su concepto y lamentó que dirigentes como Lino Heredia o Silverio Méndez, que se sacrificaron para poder alcanzar la gesta que se celebrará este viernes, no pudieran estar físicamente, aunque indicó que “estarán presentes en cada uno de nosotros”. “Estuve leyendo algunas notas viejas, y no pude evitar emocionarme. Estoy convencido de que, en este acto, se me va a piantar un lagrimón, no solo por el cariño que le tengo a Cristina, sino por lo que va a decir, lo que vamos a ver y por la gente con la que nos vamos a reencontrar. Es algo muy emocionante. Hoy nos toca a nosotros cumplir con los sueños de mucha gente, una construcción colectiva que costó, pero que será realidad. Néstor dijo ‘vengo a proponerles un sueño’, y el viernes, esa frase se llevará a la práctica”, concluyó.
(Fuente: Patagonia Nexo.)
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