Los problemas que le preocupan a Jorge García Cuerva son las adicciones, la educación y la trata de personas, y por ello dijo que trabajará con el Gobierno Provincial. Alicia Kirchner acompañó el acto y adhirió en que debe haber unión. Sergio Massa ponderó la figura del obispo y ratificó que se necesita llamar a un gran acuerdo nacional para salir del “fracaso” del gobierno de Mauricio Macri.
Tal como estaba previsto, se realizó ayer por la mañana el acto y la misa mediante el cual asumió oficialmente sus funciones al frente de Diócesis de Río Gallegos y de Tierra del Fuego, Jorge Ignacio García Cuerva. Con el lema “No apartes tu rostro de los pobres”, el flamante obispo asumió con un fuerte llamado a la unidad.
Además de la presencia del Episcopado argentino y de cientos de feligreses, hubo una importante presencia política. Estuvo la gobernadora Alicia Kirchner junto a su par de Tierra del Fuego Rosana Bertone, acompañada de funcionarios provinciales. También el intendente Roberto Giubetich y concejales.
Asimismo, dado que García Cuerva ejerció gran parte de su sacerdocio en Tigre cuando el intendente era Sergio Massa, se contó con la presencia del
líder del Frente Renovador y precandidato a presidente por el Frente Argentina Federal.
El obispo dio un fuerte llamado a los jóvenes para poner “la rebeldía necesaria para promover cambios verdaderos y no meramente cosméticos”, y se ganó el gran aplauso de la jornada cuando pidió “una pastoral, como dicen los jóvenes, ATR. A todo ritmo”.
La primera ovación de los fieles que colmaron el gimnasio del Colegio Salesiano fue cuando citó la Evangelii Gaudium del papa Francisco: “Prefiero una Iglesia accidentada, herida y manchada por salir a la calle, antes que una Iglesia enferma por el encierro y la comodidad”.
Tras la asunción y al hablar con con el medio “La Opinión Austral” acerca de los problemas que le preocupan y que quiere abordar en conjunto con el Gobierno Provincial, dijo que mantuvo una reunión con la gobernadora y le planteó tres cuestiones: las adicciones, la educación y la trata de personas, “que sabemos que acá en el sur es importante y es un drama que se vive hace mucho tiempo”.
Dijo que le planteó “que quiero ser un actor más que aporte al bien de la comunidad” y, en ese sentido, que el desafío es “trabajar en conjunto” y que “la Iglesia va a aportar lo que tiene, que es la propuesta de los Hogares de Cristo, pero no vamos a cerrarnos a ninguna propuesta porque la idea es trabajar juntos”. “La conocía poco (a Alicia Kirchner) pero tenemos una mirada social más o menos similar”, aseguró.
Por su parte la gobernadora manifestó estar muy contenta por la llegada de García Cuerva. “Creo que es un hombre muy comprometido, que va a ayudar a trabajar en conjunto para la articulación entre todos y todas, más allá de las diferencias que puedan existir y apostando a lo que nos interesa a los santacruceños: una mejor calidad de vida para el pueblo, para nuestra juventud, para nuestras familias”, sostuvo.
Al respecto de las menciones del obispo a trabajar en la unidad y en pos de lo que nos une, Kirchner remarcó que debe ser así y que “Santa Cruz nos une y tenemos que buscar que es lo más fuerte, lo que nos une a los santacruceños y trabajar en ese sentido para seguir transformando el presente”.
“Creo que el obispo tiene profundas convicciones en este sentido -agregó- será cuestión de encontrar los caminos para poder sumarnos a todo el trabajo de transformación que necesita nuestra provincia”, concluyó.
En tanto, Rosana Bertone, confió en la determinación del papa Francisco y, en la misma lógica que Alicia y el obispo, “hay que estar unidos”. Se refirió a la reunión con Kirchner, la que fue “muy interesante y profunda” y sostuvo que el peronismo debe seguir el camino de la unidad.
“Tenemos expectativas en que podamos tener un nuevo presidente en octubre, que comprenda la realidad de las distintas regiones de la Argentina”, auguró. Consultada sobre las PASO y la presencia de Massa en ese “acuerdo”, dijo que esperan que todo el peronismo pueda participar “y dar lo mejor de sí, pero en unidad y hablando de futuro”.
El gobierno de Macri, “un fracaso”
Sergio Massa aseguró que el obispo es una persona comprometida “que trabaja al lado de los que más lo necesitan y los más vulnerables”. Estuvo acompañado por su esposa, la concejal Malena Galmarini.
Sólo hubo un saludo casi protocolar con Alicia Kirchner en el comienzo del acto, y al terminar este tomó contacto con la prensa. Le pegó fuertemente a Mauricio Macri, criticando que el país está mal por sus decisiones y que “el bote por el que piden que voten, se está hundiendo”. “Argentina está en una crisis terminal”, aseveró.
Consultado sobre qué haría de ser electo presidente, ratificó su postura ya enunciada de llamar a un gran acuerdo nacional para sacar a Cambiemos del gobierno. “Esto lo arreglamos entre todos o no lo arregla nadie. Es central entender que el 11 de diciembre el país necesita un nuevo gobierno y una mayoría que lo respalde”.
Analizó que no se trata de un problema de vanidades sobre quién “lidera”, sino algo más profundo en cuanto a políticas de Estado y visión de futuro sobre el “para qué”. “Es lo primero que planteamos, mientras algunos piensan en cómo estar en el poder”, tiró al enfatizar: “queremos que Argentina salga del fracaso de este gobierno”.
Dijo que no habló con Alicia Kirchner y que hace nueve años que no lo hace con Cristina Fernández de Kirchner, y que “no sabe lo que va a hacer la presidenta (sic)”.
Por su parte el intendente Roberto Giubetich dijo que la llegada de García Cuerva será “positiva para la convivencia, en estos momentos no tan buenos para el país y la provincia”.
Días atrás se reunió con el obispo y dijo que el resultado fue realmente una “muy linda charla”. “Es un hombre que nació acá, y que creo que nos genera a todos, independientemente de la religión que practiquemos, esto de la esperanza, la ilusión y el respeto. Así que muy contento y con mucha expectativa”, dijo.
(Fuente: Patagonia Nexo.)
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