Murió el niño de 12 años que recibió un disparo en la cabeza

La Policía lo encontró en la vivienda con una herida y sangre en la cabeza. Murió en el Hospital luego de entrar a quirófano, confirmaron a La Opinión Austral. El padre, un suboficial de policía, tenía un tiro en la pierna. Investigadores siguen la pista a través de una cámara de seguridad.

El niño de 12 años que recibió un impacto de bala en la cabeza en el barrio Bicentenario de Río Gallegos murió en las primeras horas del sábado en el Hospital de Río Gallegos luego de haber ingresado de urgencia a quirófano.

Los médicos y enfermeros del Hospital hicieron todo lo posible por salvar su vida pero el niño había ingresado en grave estado y con gran perdida de sangre producto del disparo con un arma calibre 9 milímetros.

El niño fue hallado por policías de la comisaria Séptima minutos después de las 21 horas junto a su padre, un suboficial de la Policía de Santa Cruz, que tiene una herida de bala en su pierna.

Al llegar personal médico del Hospital, el niño fue trasladado de urgencia junto a su progenitor e ingresó a quirófano en estado grave.

Por la noche del viernes y la madrugada del sábado la División Comisaría Séptima y Criminalística estaban realizando pericias balísticas e inspección ocular en forma conjunta. También estaban tomando testimonios para establecer las causales del hecho.

Según pudo saber La Opinión Austral de fuentes que participan en la investigación, la Policía encontró cámaras de seguridad  en donde podrían encontrar imágenes de los autores del hecho. Sobre el caso sobrevuela un fuerte hermetismo y no se descarta que haya se haya tratado de un accidente doméstico.

Los efectivos policiales recibieron el alerta pasadas las 21 horas cuando desde una vivienda ubicada en calle 60 entre 5 y 6, en la periferia de Río Gallegos solicitaron una ambulancia y presencia policial urgente por un hecho de arma de fuego con personas gravemente heridas.

Una vez en el lugar, los policías observaron en el interior de la casa a un niño de 12 años, con una herida en su cabeza, con manchas de sangre y a su progenitor con otra herida en su pierna, manifestando que las heridas fueron producto de disparos de arma de fuego pistola calibre 9 mm.

 

Al llegar personal médico del Hospital, trasladaron a ambos de inmediato hacia el centro asistencial, ingresando el niño urgente a quirófano en estado grave. En cuanto al progenitor le realizaron curaciones.

 

Por la medianoche la Policía de Santa Cruz se encontraba trabajando para investigar los detalles ataque. Se pudo saber que fueron convocado más efectivos para reforzar las tareas y montaron un operativo cerrojo para dar con los autores.

Fuente: La Opinión Austral