La investigación de la deuda con el FMI no es una “persecución política”

El Procurador del Tesoro de la Nación, Carlos Zannini, aseguró que hay “una serie de elementos probatorios” que demuestran quiénes son los responsables de la toma de deuda con el FMI y la posterior fuga de capitales, y planteó que avanzar en la investigación de esa operatoria no constituye de ningún modo “persecución política” porque “lo que se han planteado son irregularidades que en principio configuran delitos penales”.

“Ya se presentaron una serie de elementos probatorios que considero más que relevantes para demostrar que aquello que denunció el Presidente el 1° de marzo en la Asamblea Legislativa no es algo fantasioso sino que tiene bases reales. No tiene en modo alguno un sentido de persecución política, porque lo que se han planteado son irregularidades que en principio configuran delitos penales”, subrayó Zannini en una entrevista a la revista digital Broquel, sitio web periodístico oficial de la Procuración del Tesoro

La acusación de Alberto Fernández

El 1° de marzo de este año, en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso, el presidente Alberto Fernández pidió “a las autoridades pertinentes” que “inicien querella criminal tendiente a determinar quiénes han sido los autores y partícipes de la mayor administración fraudulenta y de la mayor malversación de caudales que nuestra memoria registra”.

En ese discurso, el jefe de Estado cuestionó el préstamo récord que recibió del Fondo Monetario Internacional la administración de Mauricio Macri en 2018, al plantear que “a una Argentina en absoluto default, el FMI le adjudicó un préstamo de 55.000 millones de dólares” y luego recordó que el ingreso de esos fondos “facilitó” la salida de capitales.

“De esa cifra se desembolsaron 44.000 millones de dólares que solo sirvieron para facilitar la salida del mercado financiero argentino de capitales especulativos con la absoluta anuencia de las autoridades de entonces”, señaló entonces el mandatario.

Sobre la querella para investigar la deuda que se contrajo con el FMI en el marco de esa operatoria de endeudamiento y fuga, Zannini afirmó que desde la Procuración del Tesoro están trabajando en la investigación.

Se refirió también a la causa por la deuda millonaria de Correo Argentino SA, empresa del Grupo Socma (Sociedades Macri) que en el lapso 1997-2003 tuvo la concesión de la empresa postal oficial y que en julio pasado fue declarada en quiebra.

Sobre este tema, Zannini reiteró que la acción del Estado nacional en la causa “no es una persecución política” sino que se pretende recuperar para “el Estado y, en definitiva, a todo el pueblo argentino, una deuda que ya está verificada y que ha sido reconocida por la Justicia”.

“Lo que hacemos es defender el patrimonio estatal”, puntualizó.

Para finalizar, el Procurador del Tesoro compartió su “esperanza” de encontrarse durante los próximos años de gestión con un escenario político y social en el que haya retrocedido la pandemia, que le permita entonces “enfrentar otros desafíos”.

“Debemos avanzar en el camino que estamos llevando adelante, con un Estado eficiente que cumpla con aquellas atribuciones que tiene y que le son indelegables. Porque en sociedades tan desiguales como la nuestra, solo el Estado puede ser un factor de equilibrio”, concluyó.